Saturday, February 26, 2011

El Discurso del Rey. Señores entendidos, ¿para mi no hay Oscar?

Excelente interpretación..magnífica...brillante. Claro que doblada pierde mucho, dicen los entendidos, porque súbitamente el mundo se ha llenado de entendidos. Afirman que es mejor verla en versión original subtitulada, sin menoscabo del actor de doblaje, que aunque está muy bien, no es lo mismo..quizá le falte algo.

Le costó semanas, meses quien sabe si años conseguirlo. Llenar al mundo de "admiración interpretativa".¡Que bien lo hace! se exclama por doquier. ¿Habrá superado al original?.

Las pantallas se llenan de restrospectivas, de Marylins, Bruces y Churchills..posiblemente falten imágenes de un barrio australiano, donde estaría la fuente, en forma de niño, de la que seguramente bebíó, para hacerlo tan bien.

Hay academias y centros dramáticos, de USA, por supuesto, donde te enseñan a morir de cancer mejor que nadie, a ser durante unos minutos lo que otros llevan toda la vida intentando dejar de ser.

¿Y el co-protagonista?. Genial. Todo el mundo ve lo que consigue, aunque no cómo lo consigue, ni cómo a partir de ahi lo aplica en otros "pacientes" menos ilustres. De haber sido así, la película habría sido otra, en la que él sería el centro indiscutible.

Este es uno de esos filmes que pide a gritos una segunda parte,no de la historia, sino del guión. Tiene un poco de oportunidad perdida, de mira lo que has hecho y lo que pudiste hacer. Quizá sea la falta de implicación en el problema.

El resultado final, no puede ser: !!que bien tartamudea!!. Tampoco, como siempre ponerla en el candelero (las camisetas y los chicles) durante unos meses, para ser arrollada inevitablemente (como los vampiros) por otro asunto de moda.

El discurso del rey pasa de largo, sobre qué es la tartamudez, porqué se tartamudea, y cómo conseguir solucionar el problema. Esa sería otra historia: un thriller psicológico para el que tengo el guión, y un casting de 60 millones de merecedores del Oscar.